El Barça liquidó con facilidad su 37 partido consecutivo sin conocer la derrota. Le hizo un ‘set’ (6-0) al Getafe, que pudo ser más amplio, si hubieran forzado la máquina. Dijo Frank Rijkaard, en su día que, Andrés Iniesta “repartía caramelos” a sus compañeros. Pues bien, ahora el holandés debería ampliar su frase al referirse a Lionel Messi, ya que el crack argentino entrega auténticos “regalos” de lujo. Leo metió otro golazo al Getafe, pero es que dio tres asistencias y dio inició al autogol de los madrileños. Y eso sin jugar a tope. Messi se divirtió jugando en plan Xavi, desde la derecha, con grandes pases a sus compañeros. La ‘era Messi’ acabará cuando él quiera. Seguro que se retirará en Newell’s dando recitales, jugando de ‘diez’, a los 40.Vale, falló un penalti. ¿Y? Meter gol desde los 11 metros parece que es demasiado fácil para él. Aunque que entrenaran los penaltis entre todos, tampoco iría mal. Porque alguien debería explicarles lo que pasó en la final de Sevilla ante el Steaua, en 1986.
Los mayores que llevaron a los niños al Camp Nou, aprovechando el horario de tarde, acertaron de pleno. Más de 87.000 espectadores se dieron cita en el ‘estadi’. El partido del Barça ante el Getafe fue la confirmación de que los que diseñan los juegos de la ‘play station’ se quedan cortos, que los futbolistas de Luis Enrique son capaces de hacer eso y más. Bueno, si no se trata de tirar penaltis.
Luis Enrique afrontó al Getafe con una rotación generalizada en el equipo. Del ‘once’ habitual faltaron Mascherano (sancionado), Busquets (descanso), junto a Suárez, Rakitic y Alves, que se quedaron de salida en el banquillo. Al uruguayo no se le quiso arriesgar porque está a una tarjeta de la sanción y, además, necesitaba descanso. Ha jugado 41 partidos de los 48 posibles. El técnico también pensó que el miércoles llega el Arsenal, en partido de Champions.
Esa coyuntura fue aprovechada por hombres como Sergio Roberto, que jugó de medio centro en el puesto de Busi y cumplió con nota. Igual sucedió con Munir que firmó su tanto número ocho y dejó claro que no hace falta buscarm un ‘cuarto delantero’ para la próxima temporada, que está preparado para cubrir a la ‘MSN’, cuando haga falta.
Sin despeinarse
El Barça goleó con comodidad, sin despeinarse siquiera, a un Getafe muy limitado. Se fue al descanso con un rotundo 4-0, con un penalti fallado (ya van diez de 20), que Guaita le paró a Messi y otro claro a Neymar que el árbitro no quiso pitar. Y, de propina, otro remate de Neymar que el portero desvió al larguero.
Los madrileños, eso sí, cuando se cumplía el décimo noveno aniversario del golazo ‘maradoniano’ de un joven Lionel Messi en partido de Copa, vieron como el crack volvió a hacer otro. Esta vez hizo una mini ruleta, se deshizo de su marcador y soltó un trallazo que significó el 4-0 y que el Camp Nou se pusiere en pie para aplaudir y vitorear al genio de Rosario. Indudablemente, el Getafe saldrá con letras de oro en la historia de Messi y, especialmente, en sus grandes goles.
Antes de ese sensacional tanto, el Getafe se marcó un autogol, obra de Juan Rodríguez (8’), ampliando el marcador Munir en un oportuno cabezazo tras extraña asistencia de Messi (19’) y el tercero fue una obra de arte de esa pequeña gran sociedad que forman Neymar y Messi. Sergi Roberto empezó la jugada con un gran robo de balón y luego Lionel le dio un gran pase a Ney que el brasileño convirtió en el 3-0.
‘Manita’ y ‘set’.
Tras el descanso, el Barça siguió a lo suyo. Primero llegó el 5-0, obra de Neymar, al que las vacaciones de Brasil le han probado. Fue tras pase, como no, de Messi. Y el gol de la media docena, del ‘set’, lo firmó Arda Turan en acrobática postura de remate, en una especie de medio chilena.
Ahí, tras cobrar cumplida revancha deportiva por todo lo sucedido en Madrid con los festejos de Halloween, Luis Enrique pensó aún más en el Arsenal. Hizo salir a Vermaelen por Mathieu (Piqué está sancionado ante los ‘gunners’) y dio la oportunidad de debutar en Liga a Sergi Samper, quien entró por un Andrés Iniesta que había hecho otro excelente partido y que el próximo miércoles deberá estar fresco. También le dio minutos al ‘olvidado’ Marc Bartra que entró por Gerard Piqué. No hay duda de que los barcelonistas se lo pasan en grande, disfrutan como niños.