La Juventus ha vuelto a demostrar que la firmeza que está demostrando en su estadio se debe en gran parte a la fiabilidad de sus delanteros. Dos goles madrugadores de los arietes argentinos Paulo Dybala y Gonzalo Higuaín han resuelto, antes del primer cuarto de hora, el trascendental y matutino choque ante la Lazio, cuarta en la tabla y cerca del furgón de cabeza que persigue a la ‘Vecchia Signora’.
Fueron sendas dianas de auténticos matadores, Dybala cazó un balón cedido por Mandzukic para golpear seco con la zurda, mientras que ‘Pipita’ ganó la partida a su defensor y remachó dentro del área con la diestra un centro de Cuadrado.
